lunes, 21 de abril de 2014

Semana Santa 2014

Una vez pasada la Semana Santa son numerosos los artículos y posts haciendo balance de la misma. Son muy destacables, fundamentalmente porque estoy de acuerdo con su contenido, los realizados por Antonio Burgos y Navarro Antolín. Voy a ser breve y esquemático.

Han salido todas las hermandades gracias al magnífico tiempo del que hemos disfrutado en Sevilla. Me alegro mucho por el sector hostelero que necesita un respiro y por las familias en las que alguno de sus miembros ha encontrado trabajo. Ánimo y a seguir luchando.

Sigo considerando que la Semana Santa termina con la Soledad de San Lorenzo. Lo siento por la Resurrección.

Debido a problemas de salud he visto la Semana Santa de otra manera y hay que congratularse por la digna calidad de las retransmisiones en TeleSevilla y ElCorreo y la acertada elección de comentaristas. Felicidades por acercar lo mejor de Sevilla al mundo.

No me explico cómo algunas han sido admitidas en Carrera Oficial en detrimento de otras y cómo 
todavía hay quienes se plantean ampliar el número de Hermandades teniendo en cuenta el tiempo tan ajustado de paso y el gran número de nazarenos que realizan su Estación de Penitencia a la SMyP Iglesia Catedral de Sevilla. ¿La solución pasa por habilitar el sábado de Pasión y que los canónigos, siempre tan receptivos a las peticiones de las Cofradías, amplíen el horario de apertura de la Catedral para las salidas procesionales? Ya saben la respuesta.

Sin desmerecer a ninguna, creo que el culmen, la esencia, de nuestra Semana Santa se alcanza entre el final del Jueves Santo y el principio de la Madrugá: Quinta Angustia, Valle, Pasión, Silencio, Gran Poder y Macarena.

Tendencias de los últimos años y me temo que para los siguientes:

Las sillitas y la mala educación de la gente. Esto es una plaga. Se sitúan de manera que muchas veces bloquean la salida natural de la bulla con las consecuencias que esto puede acarrear desde el punto de vista de la seguridad y orden público y de una posible evacuación en situación de emergencia. El "de aquí no me muevo porque he llegado hace dos horas" es muy peligroso y la Autoridad habrá de tomar medidas para limitar esta práctica, mejor antes que después.
Empiezo a creer que el problema no está en quienes nos visitan, sino en los propios sevillanos que están perdiendo el "saber estar" mientras ven una procesión o son engullidos por una bulla. Ya no sabemos organizar corrientes en ambas direcciones. Si a esto le añadimos la manía de Protección Civil de poner vallitas en todas partes... La gente está por educar tanto los nazarenos que salimos (no respetando la autoridad del diputado de tramo) como el público asistente a una procesión religiosa, no lo olvidemos.

Filas de a tres o incluso de a cinco nazarenos. En algunos momentos esto parece una carrera contrarreloj, y no es eso. Está bien cumplir los horarios, es una cuestión de educación y de caridad cristiana con el resto de cofradías y si el problema es que 
el tiempo de paso no es el adecuado pues que se ajuste a las necesidades reales. Y si la solución pasa por cambiar de día alguna Cofradía pues que se haga.

Casi todos los pasos andan bien pero no nos confundamos. El objetivo de sacar Pasos a la calle no es servir de entretenimiento a las masas con bonitas coreografías, esto es una catequesis que pretende mostrar al pueblo la Pasión y Muerte del Redentor según lo entendemos aquí. Una verdadera catequesis popular.

Respecto a las marchas, al mismo tiempo que se recupera el repertorio clásico (Margot, Quinta Angustia o Estrella Sublime), se escucha cada cosa…
En algunas Hermandades hay más músicos que nazarenos. ¿Realmente son necesarios cien músicos en una banda o agrupación musical?

Y las flores...no me gustan los experimentos tropicales aunque es loable el trabajo que realizan priostes y floristas.

En conclusión, aunque ya lo sabía, soy un rancio sevillano. Un fuerte abrazo a Paco Robles.

¡Cristo ha resucitado! ¡Cristo vive! ¡Felices Pascuas!

Ya queda menos para el Domingo de Ramos de 2015.

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