No voy a hablar de la película, que por cierto, me gustó bastante. El Rey nos dirigió a todos los españoles unas palabras en su habitual discurso de Nochebuena. Fiel a su olfato político, que tenía un poco abandonado en los últimos tiempos, ha sabido captar las preocupaciones de sus compatriotas y se ha puesto el primero en la lista para empezar a cambiar lo que no se hace bien en España. Deseo de todo corazón por el bien de España, y así creo que va a ocurrir, que no se quede en unas bellas palabras y pase a los hechos. Compromiso y ejemplaridad. Larga vida al Rey.
V.E.R.D.E.
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