Recientemente se ha publicado la EPA del tercer trimestre con una significativa caída del paro. Son buenas noticias aunque todavía hay muchos españoles que quieren trabajar y no encuentran dónde.
Desde este blog he mantenido, y lo sigo haciendo, que como consecuencia de la globalización de la economía, del avance tecnológico, del masivo uso de redes sociales y la facilidad de comunicación (y de hacer negocios) que permite Internet y, por último, de la grave crisis que atravesamos, una parte muy importante de la población española que está en paro no tiene otra alternativa que buscarse y crear su propio puesto de trabajo. Por eso desde el Gobierno se tiene que dar todo tipo de facilidades para que quien quiere crear una empresa lo haga, tenga la edad que tenga.
Parece que los empresarios individuales empiezan a contratar, van perdiendo el miedo porque creen que las cosas irán a mejor (esperemos que Francia y Alemania no nos chafen esta incipiente recuperación). No son falsos autónomos. Voy a hacer demagogia. Hay casi tres millones de empresarios individuales, vulgarmente llamados autónomos. Si les bajamos los impuestos y cotizaciones sociales por contratar a una persona ¿no creéis que habría menos paro? Imaginaos que sólo la mitad de estos empresarios contraten un trabajador, serían 1,5 millones de empleos. Señores del gobierno, pónganse las pilas y ayuden decididamente a quienes pueden crear empleo en España. Los españoles se lo agradecerán.
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