La Tertulia, nueva temporada

¿ya no tienes comidas? ¿no escribes de tus tertulias? me preguntaban algunos lectores cuando me veían por la calle. Todavía no tocaba...hasta ahora.

La Tertulia no se reúne en agosto y, prácticamente nunca en septiembre, puesto que la mayoría de los contertulios pertenece a la Hermandad de la Santa Caridad (aprovecho la ocasión para recomendar una visita al Hospital y conocer la milagrosa obra y vida de Mañara) y, en su momento, elegimos voluntariamente el mes de septiembre para cumplir con nuestros deberes (en la medida de nuestras circunstancias) y no es plan (que también estoy a ídem aunque no se nota).

al fondo, los chuletones

Pero todo lo que empieza se acaba y septiembre dura lo que tarda en llegar octubre, así que convoqué debidamente a los tertuliano en nuestra sede oficial, la cocina del Aero. Primera tertulia tras el verano y había ganas, muchas ganas y casi fuimos al completo.

Los F-P, Ramón y Luís, habían traído de San Sebastián unos chuletones, con premio. Así que el plato principal lo teníamos resuelto y sólo quedaba estrujarnos las pocas neuronas que nos van quedando para decidir el aperitivo. Teníamos claro que sería algo ligerito y en poca cantidad para dejar el suficiente hueco en nuestros castigados estómagos para disfrutar de la rica carne norteña.

Mi tío Pedro, que ese día nos acompañó, aportó unas morcillas de Burgos y un tinto de Rioja, llamado Monólogo, que entró con facilidad en nuestros expertos gaznates, tanto que las 5 botellas cayeron una detrás de la otra, sin apenas darnos cuenta. Bien, pues ya teníamos un ligero aperitivo.

sobrasada con miel

pulpo

El Chefencope elaboró una riquísima parmentier a base de patatas, puerros, aceite de trufa, cebollino y nada de lácteos (espero que algunos que yo me sé aprendan a cocinar sin esas porquerías que envenenan nuestros organismos) como "cama" para el pulpo a la plancha que era el primer plato de nuestra comida. Para hacer boca trajo una espectacular sobrasada mallorquina a la que le añadimos un toque de miel que potenció la sobrasada. Todo un descubrimiento esta sugerencia de Carlos.

Tulio, Antonio...uno a uno iban llegando los comensales y nos saludábamos efusivamente, Jaime, Salvi, José Luis, Perico...¿qué tal el verano? ¡estás más gordito! ¡recuerdos a tu santa madre!, Luismi, Juan, Enrique...ya estamos todos. Faltaron Pablo, Alberto y Monc

dando buena cuenta del aperitivo

morcilla de Burgos, por poco no hay foto

Una vez cortadas las morcillas en trozos de más de un dedo de grosor, se pasaron por harina, muy poco, para evitar que explotaran en la plancha. No se le añadió nada, un poco de aceite, su tiempo y cariño, el de tío Pedro que se encargó de hacerlas. El aperitivo cayó en un santiamén, todo, todo: el pulpo, la sobrasada y la morcilla. Si cogías el móvil para hacer una foto, perdías la vez y de un plato lleno pasabas a lo que se ve en las fotos. Llega la hora de sentarse a la mesa a comer.

Creedme si os digo que comimos con moderación, casi todos estaban a dieta, salvo uno que muy jocosamente anunció que era el primer día de tertulia que no estaba a plan.

los cocineros

Se queda en la cocina el artista del día, Ramón. Algunos malpensados estarán preguntándose  ¿Ramón, artista? sí, lo es, es muy artista como saben quienes le conocen (y no digo nada más). Afortunadamente, la carne era tan buena que aguantaba cualquier cosa y, también, que Tulio, esa mezcla de sorianoargentinoirlandés, le echó una mano en la cocina para que salieran a tiempo, y en buen estado, las piezas de carne que estaban en la plancha. Muy buena carne, sí señor y cada chuletón que salía estaba mejor que el anterior, tanto en cocción como en corte. No hay duda que el artista aprendía con la práctica y los sabios consejos de los demás. De acompañamiento, patatas fritas y ensalada.

chuletones en la plancha

algo parecido al chuletón

Cada uno se pidió de postre lo que estimó oportuno y tras un brindis por España y el Rey empezó una animada sobremesa con clinquineo en la que se solucionaron todos los problemas de nuestra querida España y planificamos los eventos de la nueva temporada que con tanta ilusión iniciamos, de lo que daré debida cuenta, en su momento, en este blog.

La Tertulia